Has recorrido un largo camino...

Según me informa Crítica hoy, la megacorporación del entretenimiento The Walt Disney Co acaba de hacerse con la propiedad del total de las acciones de Marvel. Ah, Marvel. Debo admitir que, aunque nerd, nunca fui un gran lector de comics estadounidenses. Mi prioridad la tuvieron siempre las obras surgidas del viejo continente, pero siempre guardo algo de tiempo para alguna historia surgida de la tierra de la Rambo. Desde La Cosa del Pantano a (como los lectores del blog bien sabrán) Batman, podemos decir que la industria norteamericana del comic me ha dado bastantes satisfacciones. Y es por eso que no puedo dejar de sentir cierto dejo de tristeza cuando veo que una compañía que supo revolucionar el rubro del décimo arte de la forma que lo hizo Marvel en los 60's termina en manos de la misma gente que tiene las manos manchadas con la sangre de Mufasa. Y es cierto que no puedo dejar de encontrarme un tanto preocupado por esta transacción, en especial por la insidencia que pueda a llegar a tener esto en la calidad de Marvel, pero lo cierto es que la verdad hace mucho que no sale de EE UU una verdadera obra maestra. Hace poco tuve el gusto de leer el comic Wolverine Origins, y es realmente bueno y disfrutable. Es casi literalmente un "Jack London meets X-Men" con todo lo bueno que ello implica. Y ahí está el problema de todo esto, y está totalmente relacionado con ESTE post. El hecho de que Disney (que tiene en su haber, por ejemplo la distribuidora Miramax) adquiera de un momento a otro los derechos de todo el universo Marvel hace que todos sepamos lo que se viene a continuación: un maremoto aún mayor al actual en películas del rubro superhéroes venidas a suplantar cualquier otro género mermado por la falta de ideas generadas en las cabecitas de los popes de Hollywood. Esto podría ser algo bueno. Muchas veces han salido películas muy buenas basadas en comics, incluso con buenas pretenciones artísticas o realizadas por gente "del palo" (ver la buena saga de el Hombre Araña de Sam Raimi). Y la verdad es que si algo tiene la compañía Disney es buen gusto. Cuando quiere. Y personalmente creo que son dos los destinos que los posibles para la factoría Marvel:

1) El escenario optimista: Pixar. Pixar fue comprada hace poco, es cierto, pero la verdad es que venía trabajando bajo el yugo Disney hacía ya bastante tiempo. Y no solo realizaron en su momento grandes películas. Up, su última joyita, fue realizada íntegramente por gente de ambas empresas, por lo que tal vez no haya nada que preocuparse en cuanto a calidad...

El segundo destino posible es...

2) El escenario apocalíptico. Mucha gente jóven lee este blog... bah, nadie lee este blog. Pero si algún pebete viene dando vueltas por acá sepan dos cosas. Primero, cuídense de Fefo. Segundo, conozcan a Jim Henson:


Este señor fue el creador de los muppets hace una parva de años. Y los muppets son la puta masa. Así sin más ni más. Y además creó Plaza Sésamo (que no me mueve ni un pelo, pero bueno, es otra onda). Y durante mucho tiempo el tipo se encargó de armar y producir estos programas y derivados como películas, etc... Incluso se encargó de los efectos especiales en la grosseante primera y vieja película de las Tortugas Ninjas. Lo que nos compete hacerca del genial Sr Henson es el hecho de que un día se murió (como nos pasará a casi todos excepto a Indiana Jones por motivos de público conocimiento) y hace unos años sus herederos vendieron todos los derechos de su compañía a... The Walt Disney Co. Algunas de las... ejem, cosas que han sacado desde entonces fueron MirrorMask, una película hecha directamente para el mercado estadounidense de DVD's, y El Mago de Oz de los Muppets, fantabasura según nuestro amigo Jay Sherman, totalmente lejana a la genial e inolvidable Los Muppets en Nueva York, dirigida por Frank Oz, el mismo genio de Muerte en un Funeral...

En definitiva, no puede ser tan malo. Qué sería lo peor? Una película sobre el pedorro de Nick Furia protagonizada por un hombre mayor (anciano) de color negro?



Mierda!